Mensajero

Así es como se llama la traducción de una ''red social'' (si se le puede llamar así) utilizada por casi todas las personas que tienen Internet, Messenger.
Desde que me hice una cuenta, hace dos años, pensaba que el Messenger era divertido, una manera de pasar el rato. Y, aunque así es, se puede usar para otras cosas, como he hecho yo hoy.
Mientras yo estaba ultimando detalles en el blog, añadiendo etiquetas, tenía el Messenger abierto en ''desconectado'', cuando una ventanita aparece en la esquina inferior derecha de la pantalla. En ella aparece el nombre de ''él'' donde aparece debajo '' ha iniciado sesión '', algo raro en él.
Me puse como ''conectada'' y cliqueé en su nombre en la lista de conectados, donde aparecían 5 personas más.
Estuve, durante 5 minutos, con su ventana abierta y sin escribir. Sentía como yo empezaba a temblar, desde la cabeza hasta los pies, y temía hacer el ridículo incluso por Internet, donde tengo más confianza con la gente.
Finalmente, escribí ''hola'', y no había pasado 1 minuto cuando él me responde. Le pregunto qué tal, y me dice ''bien''. Luego me pregunta algo sobre los deberes de matemáticas. Finalmente, empezamos a hablar de cosas más interesantes, como las vacaciones.
Como tengo buena memoria, metí en la conversación el nombre de un grupo de música que me gusta mucho, y que a él también. Cuando le dije: me encanta ''La oreja de van gogh'', él respondió ''es uno de mis grups favoritos''.
Como suele pasar, él se conecta con poca frecuencia y la mayor parte de las veces se desconecta sin despedirse. Ha vuelto a pasar, pero según mis contactos, también se lo hace a sus amigos.
La verdad es que por msn, ha habido un avance en nuestras ''charlas''. Al principio, ni contestaba. Luego, tenía que sacarle con sacacorchos el saludo. Al final, saludaba y se despedía, pero sin aportar información. Hoy hemos hablado más.
Ojalá habláramos más en clase y en la realidad, cara a cara. Pero este tercer trimestre me he propuesto intentarlo. El tercer trimestre me da suerte. El año pasado, en el tercer trimestre fue cuando se acabaron mis problemas sociales, y ahora tengo muchos amigos.
Finalmente, tengo la sensación de que este tercer trimestre va a ir todo a mejor. No sé si es una intuición, si he leído entre las líneas de la vida, o si solo es la esperanza. De todas maneras, ahí estaré, esperando a que mis sueños se cumplan, y aunque hay pocas posibilidades, tengo la sensación de que podría pasar...